Crecimiento versus mentalidad fija: la perspectiva de un estudiante de segundo grado

Sofia Lind es una estudiante de segundo grado de Illinois. Recientemente, aprendió sobre mentalidades fijas y de crecimiento en su clase en la escuela. Su nuevo conocimiento y su posterior aplicación inspiraron a su madre, Emma, a documentar sus aprendizajes.
Como padres de Sofía, hacemos todo lo posible para instalar positividad en la vida de nuestra hija, pero a menudo nos enfrentamos al desafío del mundo ajetreado en el que vivimos, las redes sociales y los programas de televisión. Solo esperamos que, al vivir nuestras vidas con gratitud diaria, ella vea algo de esta mentalidad y observe cómo manejamos las situaciones estresantes con optimismo. Hacemos todo lo posible para modelar no rendirnos cuando las cosas nos deprimen y seguir creciendo personal y profesionalmente. Practicamos la gratitud en el auto camino a la escuela y hablamos sobre las victorias y los desafíos al final de cada día.
A Sofía muchas veces le gusta tomar prestado mi teléfono y hacer pequeños documentales sobre lo que hace o sobre los lugares que visitamos. La semana pasada, la clase de Sofía aprendió sobre cómo tener una mentalidad de crecimiento versus una mentalidad fija, y cómo podemos ejercitar y acondicionar nuestro cerebro para pensar positivamente. Como madre, me sentí muy feliz de escucharla explicar y articular tan claramente lo que había estado aprendiendo. El mensaje más profundo es algo que todos necesitamos escuchar de vez en cuando: todos cometemos errores, los fracasos son lecciones aprendidas, y si no podemos hacer algo de inmediato, persistimos y seguimos intentándolo.

En casa, hemos comenzado a ver resultados inmediatos de cómo Sofía ha aplicado su nueva filosofía y aprendizaje a sus actividades diarias. Por ejemplo, cuando hacíamos la tarea, a menudo hacíamos una ronda rápida y divertida para practicar la ortografía para el examen semanal y, si se equivocaba con una o dos palabras, se frustraba consigo misma y quería abandonar la sesión de práctica. Ahora, desde que aprendió más sobre este concepto en la escuela, dice: “Está bien. Al menos sé la ortografía correcta para la próxima vez”. Su actitud ha cambiado 180 grados y ahora Sofía a menudo nos pide que trabajemos con ella en las rondas de tiro rápido en lugar de obligarla o imponerle la práctica.
También la he visto apoyar mucho a su mejor amiga. Ambas están en gimnasia y Sofía está aprendiendo los trucos un poco más rápido, ¡principalmente porque literalmente nunca se queda quieta ni un minuto sin hacer una voltereta! He visto un buen comportamiento por parte de Sofía animando a su amiga a seguir practicando cada vez y diciéndole “¡te vuelves un poco mejor y más fuerte y pronto podrás hacerlo!”. Fue muy dulce verlo.

La maestra de Sofía, la Sra. Peters, ha estado haciendo un gran trabajo al presentarles a ella y a sus compañeros los conceptos de mentalidad fija y de crecimiento. Aunque es posible que me haya escuchado mientras escuchaba mis podcasts de Tony Robbins y Rachel Hollis, esta fue la primera vez que aprendió sobre esto por sí misma. Estamos muy felices y orgullosos de que Sofía haya aprendido sobre esta mentalidad y aún más orgullosos de que quisiera compartir esto para ayudar a otros.
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